EL RASPAO PANAMEÑO EL PREFERIDO DE LOS TURISTAS
En esas tardes calurosas típicas del clima tropical que caracteriza la ciudad Panamá, tanto panameños como turistas no pueden dejar de refrescarse con el famoso “raspao”, un refresco hecho a base de hielo granizado, leche azucarada en Panamá conocida como leche condensada y con sabores que van desde fresa, uva, naranja, limón y otros.
Los principales sitios turísticos de Panamá como el Casco Antiguo, La Calzada de Amador, la Cinta Costera siempre podrá encontrar un carrito de “Raspao” que se ha popularizado y ha evolucionado ofreciendo esta bebida incluso con miel natural o polvo de malteada.
En la Plaza de la Independencia Raúl Garcés, vende raspaos en un pintoresco carrito ofreciendo este popular refresco con sabores naturales de frutas de la temporada como piña, mango, coco, kiwi, maracuyá, típicas del trópico panameño.
Garcés lleva dos años vendiendo raspao en asociación con otros miembros de su familia en diferentes parques de la capital panameña, expresa que los turistas elogian su producto por ser elaborado a base de frutas naturales y se siente orgulloso por ofrecer un producto tradicional 100 por ciento panameño.
Cuando haga su recorrido turístico por museos, iglesias u otros sitios históricos de Panamá, recuerde buscar al raspadero y deleitarse con esta bebida que es igualmente una forma de apoyar esta actividad económica a través del turismo.
SU ORIGEN
Cuentan que, en 1850, en plena la Revolución Industrial Americana se hizo que el hielo estuviera disponible comercialmente, en las casas de hielo en Nueva York comúnmente vendían hielo a lugares como Florida.
Para transportar el hielo a Florida, las casas de hielo enviarían una carreta con un enorme bloque de hielo al sur. La ruta a Florida pasaría por Baltimore, donde los niños correrían hacia el carro y pedirían un pequeño raspado de hielo.
En poco tiempo, las madres comenzaron a hacer saborizantes en anticipación de que sus hijos recibieran algo de hielo.