Periodismo turístico nunca estuvo en cuarentena
Yazmín Jiménez Periodista de turismo
Cuando miramos hacia atrás, contamos los meses que han transcurrido desde que tuvimos que poner todo en pausa por el coronavirus la pandemia del 2020, nos asombramos por la cantidad de actividades que hemos realizado a pesar de la cuarentena y todas las que tenemos aún por concluir o en curso.
Es un hecho inédito para las generaciones que sólo sabíamos de la peste española de 1918, jamás pensamos que nuestras vidas serían impactadas con una experiencia similar.
Afortunadamente las situaciones aunque algo parecidas, por el hilo conductor de la tragedia por las altas tasas de mortalidad, los seres humanos asimilamos este proceso con una actitud resiliente y en el caso del turismo el sector más impactado aún los pronósticos de su futuro son un tanto inciertos.
Sin embargo, un componente clave para la difusión de todo lo que acontece en el escenario del turismo local e internacional, son los periodistas especializados en turismo, quienes tuvieron que tocar sus fibras internas para crear contenidos en un mundo paralizado.
Durante el mes de septiembre se celebran importantes fechas para el turismo el 27 es el día dedicado a este sector y el 5 es el día del periodista turístico para revalorizar el rol que desempeñan al momento de informar sobre un destino y todo los actores involucrados en este fenómeno social.
¿Con más de seis meses sin poder visitar un destino, un periodista especializado en turismo podría escribir sobre el particular? Por supuesto, en el 2do Foro de Periodistas y Líderes de Turismo, organizada por la Organización Mundial de Prensa de Turismo (OMPT), tuvimos el honor de presentar los “Retos del Periodista Turístico en Cuarentena”, develando que siguiendo el desafío de las 5 C, nunca hubo cuarentena para informar.
La primera C: calma, como parte principal de la salud mental para poder elaborar un material informativo con coherencia, la segunda C: la creatividad como un eje transversal buscando con olfato periodístico las historias que le interesen al público con apoyo de la tecnología, muchas aplicaciones fueron el impulso para potenciar la comunicación digital.
La tercera C: los contactos del modo presencial pasaron de la noche a la mañana a una red virtual ampliando nuestras fuentes como nunca; la cuarta C: comunicar, claro muy simple todos necesitan información con credibilidad y la firma de un periodista turístico en confinamiento era el momento justo para su empoderamiento en el campo virtual.
Finalmente, la capacitación es nuestra última C como recomendación, siempre hay que actualizar los saberes previos, todo evoluciona, los periodistas de turismo teníamos un tiempo valioso con la restricción de movilidad para ampliar nuestros conocimientos para ser más competitivos una vez se vayan reanudando poco a poco las actividades económicas.
Aunque las 5 C están conectadas para lograr un producto informativo, primero debemos romper estructuras mentales, como el miedo a la tecnología y creer que sólo los destinos son fuentes de información; las historias de interés humano son las indicadas a difundir durante el encierro, para ello no era necesario salir, basta tener las herramientas de trabajo del Siglo XXI: un buen móvil y conectividad.